Curiosidades sobre Jules Verne
“Hoy quiero dedicar esta sección a uno de los escritores, bueno, el escritor que me hizo leer. El 8 de febrero es el 197º aniversario de su nacimiento”
REVISTA WRITER AVENUE
Rocío S. Cortés
3/6/20253 min leer


Hoy quiero dedicar esta sección a uno de los escritores, bueno, el escritor que me hizo leer. El 8 de febrero es el 197º aniversario de su nacimiento. Me refiero a Jules Verne.
El 8 de febrero de 1828, el que sería uno de los escritores inmortales de la literatura. Cuando era muy pequeño, no tendría mucho más de diez años, era tan apasionado de la lectura que decidió fugarse a vivir aventuras. Descubrir lugares nuevos, encontrar tesoros… Estaba intentando subir a un barco, cuando su padre lo pilló y lo hizo volver a casa. El señor Verne tuvo un gran disgusto al no encontrar a su hijo en casa y se lo hizo saber al pequeño. Tal fue la preocupación que vio Jules en su padre que le prometió que jamás volvería a intentar vivir aventuras, tan solo en sueños. Jules Verne se refería a los libros.
Jules empezó a escribir y a escribir. Pero, además, era un apasionado de la ciencia y esta se veía reflejada en sus historias. Son harta conocidas sus novelas Viaje al centro de la tierra, Cinco viajes en globo, De la Tierra a la Luna o Veinte mil leguas de viaje submarino. En ellas no solo muestra sus conocimientos científicos, investigaciones y preguntas resueltas por amigos acerca de la ciencia, sino que llega atinar tanto en alguno de los inventos o avances en la rama que se le creía un adivino. Esto es porque habló del submarino antes de que existiera, de la posibilidad de viajar a la luna, de cohetes espaciales, de poder trasladarse por globo o incluso ver las estrellas con telescopios muy avanzados. Todo ello se cumplió.
¿Sabías que los Dumas (Alejandro Dumas) fueron sus padrinos en el mundo de la literatura? Estos le ayudaron en el mundo del teatro. Más tarde, rechazó continuar con esa posibilidad y la que le brindaba su propia familia para entregarse por completo a sus libros. Su primer éxito fue con Cinco semanas en globo y después no paró. Es el segundo escritor cuyas obras han sido más traducidas en todo el mundo (la primera es Agatha Christie).
Se dice que por un rechazo amoroso que tuvo de joven no quiso cortejar a ninguna mujer…, hasta que llegó a su vida Honorine Moral de Viane. Tuvo un amor secreto con ella mientras duraba su periodo de luto por haber enviudado, además de que se dice que Verne no quería que sus amigos lo supieran (señores algo misóginos que decían no querer casarse jamás, algo así como en la película “Una panda de pillos”, pero en la realidad…). Con esta mujer, Verne tuvo su único hijo: Michel Verne. Este continuó con el legado de su padre tras la muerte de este, dando a publicar manuscritos de este y propios. Debido a esto, se llegaron a atribuir obrar a Jules Verne de su hijo y viceversa. Se cuenta que la relación entre padre e hijo se fue deteriorando, pues Michel sufría de alguna enfermedad mental que hizo que lo encerrase en un manicomio durante un tiempo. Esto enfrío su relación para siempre y Michel se fue a vivir con su madre una vez salió recuperado del lugar. Este hecho es una de las sombras alrededor de la vida del autor.
Debido a los vaticinios científicos tan acertados que hizo en sus libros, se ha buscado homenajear sus obras por medio de la ciencia, como poniendo su nombre a naves espaciales, telescopios, asteroides e incluso a un cráter en la luna.
La pregunta es, después de conseguir tanta fama por sus libros en vida, ¿rompió la promesa a su padre? Unos dicen que jamás viajó o intentó vivir esas aventuras que ansiaba por el nivel económico, otros por su carácter taciturno, porque se sentía atado por la sociedad… El caso es que no, no vivió más aventuras que las que creaba por medio de la escritura.
¿Por qué digo que me hizo comenzar a leer? Porque el primer libro que leí en mi vida fue Veinte mil leguas de viajes submarino, lo elegí porque había leído esa frase de él en un libro del colegio. Eso de “vivir aventuras tan solo en sueños”. En la imaginación. En los libros. Y desde entonces, no paré de leer.