Patas

“A veces es como si el suelo no fuera suelo, como si el duelo no fuera duelo, como si el filo no fuera filo”

REVISTA WRITER AVENUE

David Alejandro Diaz Guerrero

11/28/20242 min leer

A veces es como si el suelo no fuera suelo, como si el duelo no fuera duelo, como si el filo no fuera filo, se camina y se levita, se llora y se bebe, se corta y se llora, de nuevo. Todo es esporádico, menos las cosas esporádicas, ya que sabemos que esas si vienen medidas, esas si tienen una razón de ser, de resto todo es tan invisible y esporádico que uno se lo espera así, se espera que las palomas se bañen en aguas saladas y se espera que las nubes se caigan y dancen después de caer. Todo es tan raro que uno llega a sentir que hace parte, y cuando va a ver, uno realmente no existe, uno aparece como cualquier día en la mañana y ya da por sentado que ha vivido y que lo que tiene de pasado es vida y no sueño. Se dan por sentadas tantas cosas, como que el amor es rojo, o como que los ladrillos hacen casas, y uno nunca respira como debe respirar de verdad y uno cree que sabe caminar y cuando va a ver se ha tropezado con todo a su paso y entonces, uno amanece un día creyendo que ha vivido, que lo que tiene por delante es vida y cuando va a ver es sueño, puro sueño.

Hay una conspiración horrible al respecto, se piensa que todos los días son iguales porque son días con los mismos nombres y no, es puro sueño. Cojean a diario, ellos sueñan que caminan, que desde siempre caminan. Y uno que va por ahí, tropezando con todo, con filos y columnas, con aceras y casas, el viento y las rejas, el silencio y la gente, sabe que caminar no es para todo el mundo.

Y pensar en las costumbres y en los golpes, en “caminar parado”, en que hay que dejar de dormir tanto, que las expectativas están matando a la gente, que los muertos votan, que las mentiras son de colores y que ahora los perros y las vacas son la misma cosa, pensar, pensar, pero tan difícil dicen. Sí, si eso es perder el tiempo, si para qué. Si la vecina tiene un hijo que conoce de eso, que los lunes aeróbicos enfrente del museo y las noticias de ayer, y que el partido de futbol y que la hija de sultana se pone ropa muy cortica y que parece una “zorrita” y que lo de pensar nada, que lo de caminar nada, y papá dice “cállese que no me deja oír la televisión” y el silencio nada, y las costumbres son lo que son y uno va a pensar, pensar, pensar y nada, puro sueño.

Que a nosotros no nos enseñaron a pensar así, “es que” para todo, y bueno, que le vamos a hacer, es al final de cuentas nuestra gente, los de nuestra casa, no ellos, y hablando de costumbres, nada, y de pensar, nada, y lo del futuro, nada, comunistas, puro sueño.